Esta es la primer acampada de una larga serie que queremos hacer este año. Hemos empezado con un plan suavecito, para ir haciendo afición, de manos de un afamado guía: Eduardo.
El domingo llegamos al lugar llamado Puerto del Boyar, para emprender la dura marcha a Benaocaz, y Ubrique, pasando por la larga llanura y luego por la calzada Romana.
Al parar a comer, 4 valientes subieron un escarpado risco de unos 60 metros de desnivel; desde donde tomaron preciosas fotos y prácticamente vieron el nido de buitres.
A las 18:30 llegamos al final del trayecto bastante cansados, donde nos montamos en la furgoneta y volvimos al campamento. Allí nos esperaba un merecido baño en la piscina, que agradecimos enormemente por la gélida agua.
Luego cena y Andrés nos cogió en el arte de ver el firmamento, explicando muchas constelaciones y su posición. Se vieron varias estrellas fugaces.
Ya queremos hacer la siguiente, pues esta experiencia ha sido muy enriquecedora.