ha sido una experiencia nueva. Nos esperaba un gía experto en los alrededores de Berrocal, que nos llevaría por el campo para ver si veíamos setas. Y así fue. Poco a poco todos encontraban más y mas setas, y ada vez más variadas. Llegamos a llenar dos bolsas.

Al terminar nos quedamos donde todos lo coches a comer y luego al pueblo a ver la exposición de el resto de setas y la entrega de premios. Este es el primer año y no nos hemos llevado nada, pero el próximo año prometemos traer un premio para Andévalo.